Para poder impartirla y siguiendo el modelo semipresencial recomendado por las autoridades sanitarias, el centro dispone de unas 20 webcams que se ubican en las aulas. Las cámaras están montadas en trípodes y conectadas a los PC Windows del profesor y los alumnos se conectan mediante Google Classroom desde sus casas.
Este equipamiento posibilita impartir la clase a todos los alumnos, tanto a los que están en el colegio como a los que, por motivos de la pandemia, se encuentran en casa. Con esta tecnología, pueden ver al profesor, seguir la presentación que esté proyectando, focalizarse en la pantalla física o en la pantalla digital.
En este contexto, el profesor tiene libertad para moverse por el aula e interactuar tanto con los alumnos que se encuentren físicamente en ella como con los que lo hagan desde sus hogares. Por su parte, el profesor puede visualizar en todo momento a sus alumnos y permitirles participar e involucrarles activamente en la clase como si estuvieran de forma presencial.
Gracias a la tecnología esperamos también potenciar la autonomía del alumnado con su teletrabajo, la responsabilidad de cada uno de ellos para participar de forma activa, la colaboración entre todos y, cómo no, el fomento de la competencia digital.