Eso lo sabe muy bien nuestro querido Mohammed, que lleva unos tres años cuidando del huerto escolar. Él se encarga de sembrar, podar, regar, quitar las malas hierbas… y ayudar a los alumnos y alumnas. En esta entrevista, Mohammed El Ouazizi Bouzit nos cuenta algunos secretos del huerto.
El 15 de abril, Mohammed sembró las primeras tomateras de este curso y desde entonces cada producto en su tiempo. Ahora es cuando más bonito luce el huerto, nos cuenta, porque ya hay flores en todas las plantas y han crecido las primeras hortalizas: «las lechugas ya se pueden recoger».
Durante estos meses de abril y junio, ha sembrado varios tipos de tomates, berenjenas, pimientos, pepinos, patatas, cebollas, acelgas, zanahorias, calabacines, melones, perejil, lechugas, ajos y guindillas.
En su día a día, Mohammed ayuda y aconseja a los alumnos y alumnas del colegio sobre cómo se debe plantar cada verdura y hortaliza, cómo se tienen que cuidar, y reconoce que a «los estudiantes les encanta venir al huerto y aprender».
«Las plantas están vivas y necesitan que nosotros las cuidemos con alegría»
Para él no hay nada difícil y todo el tiempo en el que no tiene que hacer otras labores en el cole, lo pasa cuidando el huerto. «La huerta necesita mucho cariño», nos dice, «y es muy bueno ponerle música. Las plantas están vivas y necesitan que nosotros las cuidemos con alegría. La música ayuda a que estén alegres y yo se la pongo todos los días mientras trabajo aquí».
Mohammed nos cuenta que también hace el abono de forma natural, con hierba y restos de la comida y asegura: «En este huerto no hay ningún producto químico, es un huerto natural 100%».
La recogida de las verduras y hortalizas se hace con los alumnos y alumnas, en la medida de lo posible. También se encargan Mohammed y el equipo de mantenimiento. Los productos se reparten entre el personal del centro y alumnos con los que se estudia todo el proceso de reproducción de la planta. Parte de la cosecha se reserva como material para el semillero de la próxima temporada.