Los Colegios Zola entrevistan a Francisco Mora
Mora es Doctor en Neurociencias por la Universidad de Oxford y doctor en Medicina por la Universidad de Granada y catedrático de Fisiología en la Universidad Complutense de Madrid. Además es un referente internacional en Neuroeducación y autor de numerosas publicaciones y libros como «Neuroeducación: solo se puede aprender aquello que se ama», el profesor destaca la importancia que tienen las emociones en el aprendizaje.
Francisco Mora, “Una persona emocionalmente inteligente es más creativa”
“Hay millones de ejemplos que nos demuestran que el tipo de pensamiento creativo, es el que propiamente alumbra cosas nuevas«
- ¿Qué papel juega la emoción en el aprendizaje?
Juega un papel absolutamente fundamental. La emoción es aquello que enciende, a través de la curiosidad, la atención y sin atención explícitamente no hay ni aprendizaje ni memoria.
- ¿La educación emocional favorece la creatividad?
Una persona emocionalmente inteligente es más creativa. Si por creatividad entendemos el uso de una atención holística. La creatividad se pone en marcha tras aplicar una atención que es inconsciente, es alguien atacando un proglema, entendiendo el problema como el pensamiento crítico, el matemático, filosófico … en ese sentido entra lo que llamamos la atención holística. Un tipo de atención cuyo circuito neuronal están fundamentalmente en el circuito derecho. Desde el inicio de este proceso pueden pasar tres semanas, cuatro meses… ese celebro holístico está continuamente trabajando, aunque tú no lo sepas, está buscando la solución al problema y ese celebro holístico uno de los grandes descubrimientos.
Hay millones de ejemplos que nos demuestran que el tipo de pensamiento creativo es el que propiamente alumbra cosas nuevas, cosas que no son continuación de otras, eso sería la innovación, sino cosas que sería nuevas, y eso es la creación.
- ¿Qué aporta la neurociencia al proceso de enseñanza-aprendizaje?
Hoy sabemos que no se puede aprender nada sino es aprendido por el propio proceso de la emoción.
- ¿Entonces la conocida frase que a veces dicen los profesores “ atiendan, atiendan”, no vale de nada?
No vale absolutamente para nada, es estéril. Hoy sabemos, basados en nuestra neurociencia, que lo que hay que hacer es despertar la curiosidad y ya no necesitas nada más. La atención dura unos 15 o 20 minutos, aun haciendo la clase interesante, por eso no se puede dar una clase de 50 minutos. ¿Qué se puede hacer? simplemente interrumpe el discurso que estabas dando de una materia específica y cuéntales lo que te da la gana, algo que no tenga nada que ver con aquello. Con sólo un minuto de interrupción del discurso académico de ese momento, consigues su atención, permites que el propio sistema se recicle.
- ¿Cómo pueden las familias ayudar a educar emocionalmente a los niños?
Las familias y el colegio tienen que trabajar en el mimo sentido. Tú no puedes enseñar ética en el colegio sino viene sustanciada por lo que es la familia. La familia es donde el niño recoge el pilar emocional y de modo inconsciente lo que verdaderamente vale. En las familias se hablan de cosas inconscientemente, a la edad de 0-3 años cualquier palabra del padre y no te digo de la madre, cobran la solidez de un ladrillo que se tiene que construir desde abajo hacia arriba, en un mundo de valores, normas y hábitos éticos.